Este colorido espacio tiene su origen en un pequeño mercado para la venta de verduras, frutas y flores, a precios económicos o baratos y de ahí viene su nombre popular “Baratillo” dejando en el olvido su nombre oficial que es plaza Joaquín González.
Las actividades que dieron origen a esta plaza aún continúan vigentes, es posible seguir comprando frutas, verduras y flores ahora complementados con otras opciones gastronómicas.
Los balcones, sus coloridas fachadas y la fuente de metal con su base en cantera te permiten realizar un viaje al pasado y admirar su esencia del Guanajuato Colonial.
.